Ven. Ven despacito y con buena planta.
Que parezca que el tiempo se detiene mientras nos encontramos
y que tus pies conocen el camino.
Ven. Ven despacito y con buenos ojos.
Que las arrugas en el vestido,
estos ríos negros en las mejillas,
el lazo deshecho
y la respiración entrecortada
es por la agitación que sufren mis mariposas.
Ven. Ven despacito y con buena meta.
Que estos brazos no se cansan de estar abiertos
ni este pecho de esperar tu sombra.
Ven. Ven despacito y con buenas intenciones.
Que las malas nos esperan en la cama
junto con el té de las cinco
y cinco te quieros que atrapé la última noche.
Ven. Ven despacito y con buena letra.
Que yo te presto saliva para que escribas en mi cuerpo
poesía.
Ven. Ven despacito pero no pares.
Que el tiempo se corre lentamente entre tus piernas
y si lo detienes muere, amor.